Imagina esto: Estás sentado frente a tu pareja cenando, el tintineo de los cubiertos contra los platos llena el silencio. Llevan meses, quizá años juntos, y sin embargo, mientras se ríen de algo que dijiste, una pregunta silenciosa te ronda la cabeza: ¿De verdad sé quiénes son? Es un pensamiento fugaz, que fácilmente descartas mientras das un sorbo a tu vino y pasas al siguiente tema. Pero ¿y si esa pregunta no es solo un capricho pasajero? ¿Y si es la clave para una relación más fuerte, sana y plena? Guía práctica para incorporar la atención plena en tu día a día.